Trágico Incidente en Iztapalapa: La Heroica Abuela Alicia Sacrifica su Vida para Salvar a su Nieta en la Explosión de una Pipa de Gas
En un acto de amor inquebrantable que ha conmovido al país entero, Alicia Matías Teodoro, una abuela de 49 años conocida por su dedicación familiar y su espíritu trabajador, perdió la vida tras proteger a su pequeña nieta de dos años durante una devastadora explosión en el distribuidor vial de La Concordia, en la alcaldía Iztapalapa de la Ciudad de México. El incidente, ocurrido el 10 de septiembre de 2025, se convirtió en una tragedia que dejó un saldo de al menos seis fallecidos y más de 90 heridos, pero la historia de Alicia destaca como un símbolo de valentía y sacrificio en medio del caos.
El accidente tuvo lugar alrededor de las 4 de la tarde, cuando una pipa cisterna de la empresa Transportadora Silza, cargada con aproximadamente 50 mil litros de gas LP, perdió el control en la Calzada Ignacio Zaragoza, cerca del Puente de La Concordia. Según las autoridades capitalinas, el conductor impactó contra un muro de contención, lo que provocó la volcadura del vehículo y una explosión masiva que generó un incendio feroz. Las llamas se propagaron rápidamente, alcanzando el segundo piso del distribuidor vial y el paradero del Metro Santa Martha de la Línea A, una zona concurrida por commuters y trabajadores locales. La onda expansiva y el fuego atraparon a decenas de personas, incluyendo usuarios del transporte público y vendedores ambulantes, en lo que ha sido descrito como una “zona cero” de destrucción.
Alicia, quien se desempeñaba como checadora y despachadora en la base de combis del paradero de Santa Martha, estaba a solo diez minutos de finalizar su turno cuando ocurrió la catástrofe. Hacía dos años que había iniciado en ese empleo, después de haber operado un puesto de dulces en el mismo lugar para sostener a su familia. Ese día, como en muchas otras ocasiones, cuidaba a su nieta Azuleth (o Jazmín, según algunas fuentes familiares), de apenas dos años, mientras su hija Rosa —madre soltera y trabajadora como intendente— realizaba un mandado. La niña acompañaba a su abuela al trabajo porque no había opciones de cuidado infantil disponibles, una realidad común en muchas familias de bajos recursos en la zona.
En medio del estruendo y el pánico, Alicia reaccionó con un instinto protector que le costó la vida. Al sentir la explosión, se lanzó sobre su nieta y la cubrió completamente con su cuerpo, actuando como un escudo humano contra las llamas y las partículas incendiarias. Este gesto heroico evitó que Azuleth sufriera quemaduras graves; la menor solo presentó lesiones leves y fue dada de alta rápidamente. Sin embargo, Alicia resultó con quemaduras de tercer grado en el 98% de su cuerpo, una condición crítica que la dejó en estado de coma inducido y dependiente de oxígeno en terapia intensiva.
Inmediatamente después del incidente, un policía local, Sergio Soriano, fue uno de los primeros en auxiliarla. En imágenes captadas por cámaras de videovigilación y testigos, se ve a Alicia, desorientada y con el cuerpo envuelto en llamas, entregando a su nieta al oficial para que la pusiera a salvo. Soriano, quien narró después su experiencia conmovido, cargó a la niña y ayudó a la abuela hasta la llegada de los paramédicos. “No pude salvar a todos”, confesó el policía, destacando el caos en el que choferes, comerciantes y transeúntes se unieron para rescatar a las víctimas.
Alicia fue trasladada de urgencia al Hospital General de Zona 53 del IMSS en el Estado de México, pero dada la gravedad de sus heridas, fue derivada al Hospital de Quemados en Magdalena de las Salinas (Clínica 53), especializado en casos como el suyo. Los médicos le dieron solo un 2% de probabilidades de supervivencia, y su familia, encabezada por su hija Jessica o Rosa (según relatos), se mantuvo al pie de la cama rogando por un milagro. “Hagan todo por salvar a mi mamá, ella no le tocaba estar ahí… Con su cuerpo protegió a la bebé”, imploró Rosa en entrevistas con medios locales, mientras exigía que la empresa responsable cubriera los altos costos médicos.
Lamentablemente, a pesar de los esfuerzos del personal médico, Alicia falleció en las primeras horas del 11 de septiembre de 2025, dejando un vacío inmenso en su familia y en la comunidad. Su partida ha generado una ola de solidaridad en redes sociales, donde se la ha apodado “la abuelita heroína”. Miles de usuarios han compartido las fotografías del momento del rescate, con mensajes como “Eres más que una heroína. Amor infinito” o “Súper abuelita”, y se han organizado colectas para apoyar a sus seres queridos. Familiares y vecinos piden que su legado de amor y coraje sea recordado, mientras exigen una investigación exhaustiva sobre el accidente por parte de la Fiscalía General de Justicia de la CDMX (FGJCDMX) y una revisión al sistema de traslado de sustancias peligrosas, como anunció la jefa de Gobierno, Clara Brugada.
El conductor de la pipa, quien también resultó gravemente herido, permanece en estado crítico bajo custodia policial, mientras las autoridades investigan si hubo fallos mecánicos o negligencia. Este trágico suceso no solo resalta la vulnerabilidad de las zonas urbanas densamente pobladas como Santa Martha, sino que también inspira con historias de humanidad, como la de Alicia, cuyo amor inmenso vivirá por siempre en los corazones de quienes la conocieron. Que Dios la acoja en su gloria.