Esposa de Ricardo Mejía Berdeja presume aretes Van Cleef de 100 mil pesos: ¿se suma a la “austeridad republicana” de la 4T?
Ciudad de México, 11 de noviembre de 2025 – En un momento en que el gobierno de la Cuarta Transformación promueve la “austeridad republicana” como pilar ético, Marlenne Cañas, esposa del diputado petista Ricardo Mejía Berdeja, ha reavivado críticas al exhibir en redes sociales joyería de alta gama valorada en cientos de miles de pesos, incluyendo aretes de Van Cleef & Arpels por al menos 100 mil pesos, durante un evento del PT en marzo pasado.
Las imágenes, compartidas en Instagram donde Cañas acumula más de 240 mil seguidores como “tiktoker” y “defensora de los que no tienen voz”, muestran a la influencer luciendo un conjunto de la exclusiva firma francesa: un collar estimado en 400 mil pesos y los aretes en 100 mil, según el catálogo oficial de la marca. Este despliegue de lujo se suma a sus recientes stories de cumpleaños, donde presumió bolsas de Gucci, Louis Vuitton, Dior y Valentino, bailando al ritmo de “Las Mañanitas” y la sesión de Bizarrap, con mensajes como “Amé, súper amé. Gracias, besos, miles”.
Cañas, originaria de Acapulco y casada con Mejía Berdeja desde 2016 en una boda de lujo en la isla griega de Santorini, se presenta en sus perfiles como apasionada por la fotografía y el activismo animal, colaboradora cercana del exgobernador priista Héctor Astudillo. Su rol como impulsora de la carrera política de su esposo —quien aspira a la gubernatura de Coahuila y ha sido comparado con Samuel García por su dupla de “influencers”—ha generado polémicas previas, como su encontronazo con Mario Delgado en 2023, a quien llamó “corruptazo” y “vergüenza de Morena”.
El contraste con el discurso oficial de austeridad —que prohíbe lujos en funcionarios y sus familias—ha desatado un torbellino en redes sociales. Usuarios cuestionan el origen de estos obsequios en un contexto de recortes presupuestales y promesas de “servir al pueblo”, con comentarios como “¿Austeridad para quién? ¿O solo para los de abajo?”. Analistas ven en esto un patrón de “fosfodamas” modernas, aludiendo a figuras como Beatriz Paredes o Mariana Rodríguez, donde el glamour personal eclipsa la narrativa transformadora.
Ni Cañas ni Mejía Berdeja han respondido a las acusaciones, que se viralizan en un PT aliado a Morena pero marcado por tensiones internas, como la renuncia de Mejía a la encuesta morenista en 2023 por presunta corrupción. El caso resalta la brecha entre el activismo declarado y el estilo de vida ostentoso, cuestionando si la “austeridad republicana” es para todos o solo un eslogan en la era Sheinbaum.
